Dormimos como bebés esa noche y claro que lo necesitábamos después de haber manejado muchas horas y pasar la noche en Hierve el Agua. Despertamos con tranquilidad y fuimos a desayunar al Mercado 20 de Noviembre para tener energías para el largo día que nos esperaba conociendo el centro de Oaxaca. Después de recorrer el mercado de punta a punta decidimos sentarnos en uno de los tantos puestos de comida que hay. De entrada pedimos lo que se estaba volviendo regla en este viaje “chocolate con agua” y después unos tamales Oaxaqueños. Con el estomago lleno y el corazón contento nos dirigimos de vuelta el centro con dirección a la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción. Como era de esperarse en una ciudad que es Patrimonio de la Humanidad al centro de la catedral se encontraba un magnifico órgano. La catedral no es muy grande pero si cuenta con muchos detalles finos, así como varias capillas laterales.
Al salir de la catedral tomamos el andador turístico que nos dejó en el MACo (Museo de Arte Contemporaneo) donde aprovechamos para conocer un poco el otro lado del arte en Oaxaca. Desde ahí el camino nos llevaba a Santo Domingo peor al llegar ahí nos dimos cuenta que la iglesia estaba cerrada por lo que pasamos al Ex-Convento que ahora es un museo. Nuestro objetivo principal era visitar la sala donde se encontraban los restos recuperados de la Tumba 7 de Monte Albán. El museo es impresionante por si mismo pues el Convento tiene una construcción muy imponente tanto por su tamaño como por sus detalles. Saltando entre salas pudimos salir a tiempo para encontrarnos el Templo de Santo Domingo abierto. Poco antes del atardecer. con sus paredes en chapa de oro es cuando más impresionante se observa.
Nuestro sexto sentido nos decía que era momento de movernos y el destino fue el Jardín Etnobotánico de Oaxaca que se encuentra a espaldas del Templo de Santo Domingo. Originalmente este espacio estaba destinado a convertirse en un gran estacionamiento, por suerte un grupo de personas presionó para que se llevara a cabo este hermoso proyecto. Con nuestra genial suerte llegamos un par de minutos antes de que comenzara el último recorrido (5 de la tarde). El recorrido estaba lleno de gente pero ahí conocimos a Valente que tiene un proyecto bastante interesante llamado Hierofantes (poesía y rap conciencia). Salimos del tour corriendo a tomar un foto del atardecer contra el Templo de Santo Domingo pero llegamos tarde. Por suerte todavía estaba abierta la tienda de tapetes provenientes de Teotitlan del Valle donde pudimos ver unos tapetes hechos con gran detalle. La siguiente vez con más dinero podremos comprar unos que bien vale la pena. Seguimos nuestro camino por entre todos los puestos que había de una feria de artesanías. Recorrimos uno por uno los más de 10 puestos de alebrijes escogiendo los mejores. Sin duda los provenientes de San Martín Tilcajete eran los mejores y a ellos les compramos dos para nuestra colección.
Esa noche fuimos a dormir al hotel (Hacienda la Noria) pues el siguiente día nos esperaba un muy largo camino de regreso a nuestra casa.
Leave a Reply